Colección de poesía Wallada, nº 10
POETAS:
Aurora Gámez Enríquez
Inmaculada García Haro
Fuensanta Martín Quero
Encarna López Navarro
Mercedes Sophía Ramos
Rosa Ruiz Gisbert
Alice Wagner Ortuño
PINTORAS,
ILUSTRADORAS:
Soledad
Fernández Ramos
Larissa
Sarria
COORDINADORA:
Aurora Gámez
Enríquez
Intervienen en la presentación Carlos Torres,
editorial ExLibric
Aurora Gámez Enríquez, coordinadora Colección de poesía Wallada
Escondida detrás de su
sombrero, de Rocío Cardoso
Prólogo de Aurora Gámez Enríquez
es
ella la que llora
en ese vacío
Rocío Cardoso
Siempre se ha dicho que la cara es
el espejo del alma, por eso el título de este libro de poemas de Rocío Cardoso
es tan sugerente y simbólico. Todo hace pensar en una tragedia contenida, en la
ocultación de huellas de humillación y sometimiento. Rocío Cardoso es una poeta comprometida con
la eliminación de la violencia hacia la mujer. Para el prólogo de su libro “Una
voz sin susurros” Ed. Botella al mar 2016, escribí:
“La
propuesta poética “Una voz sin susurros” también nos dice mucho sobre el
compromiso de la poeta, ella es una escritora comprometida con su tiempo,
quiere desvelar, dejar ver cómo están las cosas y también nos va indicando la
necesidad de cambio. Hace visible las emociones, impacta con la
palabra precisa, no deja indiferente a quién lee, mueve a solucionar la
violencia de género por empatía, este es el efecto que consigue magistralmente
con su obra poética. Rocío Cardoso nos acerca, con su poesía, a la intimidad de
la mujer maltratada.” “Escondida detrás del sombrero”, es una continuación de
la obra poética de Rocío Cardoso, en ella insiste en contar la vida de una
mujer maltratada desde la intimidad de sus pensamientos. Incómoda una trata de
zafarse del dolor pensando: Ella no soy yo, o sí. Ella está muy lejos, o no.
Inevitablemente como mujer te pones en lugar de Ella (el personaje poético)
entrando en una melancolía y una angustia difícil de soportar. Rocío Cardoso
nos pone frente al espejo, hace reflexionar y nos obliga a pensar (Ella no
tiene nombre, Él es anónimo, ¿la pareja, el esposo, el padre?) Cualquiera que
se acerque a la poesía de Rocío Cardoso podrá sentir el dolor, la humillación
continuada y una agonía atemporal que casi se puede palpar.
“Ese hombre
la vigila
ella ve
su paso firme
sin saber cuánto tiempo más
soportará ese tormento “
Rocío Cardoso tiene estilo
narrativo propio, hábilmente nos conduce verso a verso por el camino emocional
de Ella. Nos encontramos ante una mujer maltratada que parece incapaz de salir
de su aislamiento. Rocío Cardoso sabe que mi experiencia de años en la atención
a mujeres que sufren maltrato y en programas para la eliminación de la
violencia hacia la mujer me va a hacer saltar en rebeldía. Ella lo sabe y me
pide un nuevo prólogo para éste que es el tercer libro de poesía que trata la
violencia hacia la mujer. Hay una
novedad y es que este libro se va a editar en España, los anteriores libros editados
en Uruguay han tenido una difusión y un reconocimiento magnífico. Cabe citar la
Ley [1] española de protección integral contra la
violencia de género de 2004[2] y la Ley de Igualdad entre mujeres y
hombres de 2007 [3] . Este sería el marco legal que nos
ampara.
“La
violencia contra la mujer es el crimen encubierto más frecuente en el mundo.”[4]
La experiencia me dice que si no
se llega al corazón de la persona ésta no reacciona de manera que posibilite el
cambio. La inteligencia emocional y la ayuda externa de profesionales
especializados en temas de violencia de género debería indicar el camino para superar
la situación de víctima. En el lenguaje poético se interioriza lo real
concediendo palabra al ánimo intuición y sentimiento. Se expresa interioridad,
lo que es se concentra en el sentimiento que se universaliza, se destila en las
palabras para dirigirse a la conciencia. La libertad del sujeto (Ella en el
poemario de Rocío Cardoso), es la que impregna desde dentro de sí todo aquello
que él (el sujeto) expresa en su canto. Esta sería en esencia la definición de
Lírica en la teoría de Hegel La Poesía y el Mundo.
“La violencia contra las mujeres es una
manifestación de las relaciones de poder históricamente desiguales entre
hombres y mujeres, que han conducido a la dominación y la discriminación contra
la mujer por el hombre, y para frenar el avance pleno de la mujer”. Declaración
de Beijing, ONU, 1995.
Si algo nos une a Rocío Cardoso y
a mí, es la opción poética para expresar nuestra solidaridad con las mujeres
que sufren violencia de género. En este camino sórico nos encontramos. Concluyo
agradecida con uno de mis poemas:
ROMPER LA FUENTE DEL DOLOR
Niña puedes romper la fuente del dolor
ser tú volver en sí, del abismo emerger
mover tu identidad, en ella resolver
armonía vivir, soñar sin más temor.
Niña debes romper el círculo violento
abrir tus ojos grandes, dejar ya de llorar
pues sufres la violencia en tu cuerpo
mortal
si el silencio rasgaras, gritaras como el
trueno.
Niña puedes romper la
fuente del dolor
y cimentar un mundo de
afecto y de armonía
con voz sincera ocurra
que siembres la poesía
y tu vida acontezca con
verdadero amor.
Aurora
Gámez Enríquez, poeta
Presidenta
Grupo ALAS (Autoras por la Literatura y las Artes)
Delegada de la Asociación Colegial de Escritores de España Sección Autónoma de Andalucía
[1]
Ley Orgánica 1/2004 de 28 de
diciembre Medidas de protección integral contra la Violencia de Género. España.
[2]
“Acto de violencia física y psicológica, incluidas las agresiones a la libertad
sexual, las amenazas, las coacciones o la privación arbitraria de libertad,
ejercida por quienes sean o hayan sido sus cónyuges, o quienes estén o hayan
estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad, aun sin
convivencia”. Ley Integral, L.O.1/2004.
[3] Lay Orgánica 3/2007, de 22 de
marzo para la Igualdad efectiva entre mujeres y hombres. El artículo 14 de la
Constitución española proclama el derecho a la igualdad y a la no discriminación
por razón de sexo. Por su parte, el artículo 9.2 consagra la obligación de los poderes
públicos de promover las condiciones para que la igualdad del individuo y de
los grupos en que se integra sean reales y efectivas.
[4] Asamblea
ONU. IIª Conferencia Mundial sobre la Mujer. Copenhage, 1980.
Jákara Editores
Sobre ·Reunidos con el sol” de Mercedes Sophía Ramos
Por Aurora Gámez Enríquez
Tú y yo...enredadas, unidas y abrazadas
créame a tu imagen, indivisible y
multiplicada,
quédate conmigo, para que estés después de
siempre,
déjame que exhiba tu belleza plena y
regalada.
A
las letras. Mercedes Sophía Ramos
A veces lo más cercano y
conocido es lo más difícil de definir. Hablar de la poesía de Mercedes Sophía
Ramos, para mí, es casi como hablar de mí misma. Me da pudor. Es por eso que me
resulta difícil emprender este proyecto de prólogo que mi querida amiga me ha
solicitado con tanto cariño y fervor. Me siento parte y partícipe del mismo, es
un sentimiento fundado. Son muchos los años que llevamos en el empeño, no solo
de escribir, sino de editar la obra escrita por mujeres. Ella es la secretaría
del Grupo ALAS desde hace años y es sabido que yo soy la presidenta desde la
fundación del mismo. Mercedes empezó tímida, se entregó al secretariado de
ALAS, y en silencio casi a escondidas fue creciendo su obra literaria. Ya me
atreví a prologar su primer libro de relatos, cuya primera edición estuvo a mi
cuidado siendo una edición de ALAS y que llegó a la segunda edición en la
Editorial Vértice. Este es su primer
libro de poemas en solitario, quizás por eso ha querido reunirlos con una
selección de poemas de sus amistades poéticas. Maravillosa idea y muy original.
Me voy a centrar en el libro
que amorosamente ha cuidado su autora.
El
libro tiene una hermosa portada de la autora, perteneciente al Grupo ALAS,
Larisa
Sarria cuyo verdadero nombre es Orysia Vasylivna Rynzhuk, nacida en la ciudad
ucraniana de Chernivtsy. Magnífica presentación para arropar su singular obra
poética.
“REUNIDOS CON EL SOL”, nos
ofrece un buen número de poemas de Mercedes Sophía Ramos pero no solo eso, ella
ha querido hacer este camino con una selección de poemas de entre sus amistades
poetas. Aquí no solo tengo que agradecer que me invitase a participar, lo hice
con “Ternura encendida” -soneto
inédito a mi madre-, sino que me dedica un poema suyo “Hablaba de ti”. Ella es así, generosa hasta el límite. Mercedes
Sophía ha concebido este libro de poesía como una reunión familiar -incluye
pinturas de su hermana Adela, una pintura de su hermano Antonio, otra de su hija
Mª Mercedes y la letra de una canción de su hermano que concursó en el festival
de la canción de Benidorm en el año
1980. El grupo de autores invitados lo conforman poemas de distintos
estilos y variadas temáticas, un compendio de voces heterogéneo y extrañamente armónico.
Su poesía inicia un recorrido amoroso
con su poema “El globo amarillo”, con
“Ave cantora”, una metáfora de la
toma de conciencia de su esclavitud y ataduras y deseos de libertad. “Oxido”,
un clamor a la conciencia humana sobre la destrucción de la naturaleza. “Solo sol”, recreación de la belleza,
canto a la vida. “Corazón de Mujer”, lucha
por la propia identidad, la conquista y afirmación de una misma. En el poema “Simples”, la observadora poeta pasea la
mirada por la gente sencilla, que no simple, la valora y sublima como únicas
hijas de la libertad. En “La Taquilla”,
convierte una excursión al mar en una metáfora amorosa. En el “El coche rojo”, todo es reclamo
amoroso. “Inspiración”, amor a la poesía, a la creatividad y el arte.
Metáfora del amor incondicional hacia el sujeto amado. “Bolas de fuego”, sentimiento de liberación, de mujer nueva y
asertiva. “10 días y un mes”, mensaje
de amor. En el poema “Es mío”,
protesta contra el mal trato a la mujer, clama a la visibilidad de este hecho,
a la rebeldía, clama justicia.
Nos ofrece poemas tan hermosos
como los dedicados a sus hijas:
“Ella no lo sabe.
No sabe que el sol que lleva dentro
la inunda de belleza,
ignora que las diosas se aliaron
que se alinearon todos los astros
al contemplar su armonía.”
Del poema “Ella
no lo sabe” dedicado a su hija Mª Mercedes
“Tan transparente como el agua
inunda
su espacio de cariño
convirtiendo
claros todos los días,
la
naturaleza imprescindible aliada
le dio
dones encantados de bondad.”
Del
poema “El sol que te mira” dedicado a su hija Paloma
Ella no se olvida de
personajes solidarios a los que da un homenaje con su poesía para que no queden
en el olvido, que se les tenga en cuenta: “Me
hablaron de ti” a Teresa de Calcuta, “Por
la libertad” a Martín Luther King
Hace
un recorrido a poetas admirados, “Nunca
te venció” a Lorca, “No hace falta”
a Borges, “Delfines en la montaña”
para Cervantes, “Corazón que vuelves”
a Antonio Machado, no se olvida de Miguel de Unamuno.
Pero sobre todo Mercedes
Sophía Ramos hace un gran homenaje a la amistad, incluye en el libro una
selección muy escogida de poemas de quiénes en su trayectoria literaria les han
inspirado admiración y cariño, resulta una ofrenda generosa en la que incluye a
sus compañeras de letras y de arte del Grupo ALAS. El poema de Inmaculada García
Haro “Malabaristas del tiempo”; “Hablaba
de ti” que me dedica y “Los países de
Alice”, es una declaración de admiración y de amistad. “Horizonte
marino”, poema a Fuensanta Martín Quero; “Contradicción”, poema a Encarnación López Navarro; “Tu mirada detenida”
de Rosa R. Gisbert. El poema a su amiga Inmaculada Perdiguero Rojo está
incluido entre este ramillete de poemas.
Ella vuelve a los poemas de
amor como tema recurrente, en “Flores en
las rocas”, sigue con los poemas a sus hijas y nieta, con el poema a su
nieto.
En la III Parte se permite una
tierna experiencia mostrándonos algunos de los poemas de su adolescencia.
Imprecisos, inseguros, con faltas de sintaxis, faltas de ortografía. Muestra
sus inseguridades, su estado de ánimo juvenil. Mercedes se pierde en ese jardín
entreverado de sensaciones infantiles, explorando el mundo de los adultos por
primera vez. Se descubre en el amor y sufre por ello. No le importa mostrarse
tal como fue, lo reivindica. Sorprende esta decisión suya y la hace, ante la vista
de sus seres queridos, más valiosa y tierna.
Resulta pues una memoria
poética o sentimental entrañable. Me queda agradecer a Mercedes que confiase en
mí para hacer este prólogo, espero que sea de su gusto.
ERENA BURATTINI
Nace en Valdivia, Chile.
Residente en Santiago de Chile y Málaga, España. Casada con 4 hijos.
Estudios de Bellas Artes en
La familia se traslada a
Santiago. Inicia una empresa artesanal de velas. Por su sentido de innovación,
dominio del color y el espacio, las velas hacen historia. En la exposición
anual del Club de Jardines de Santiago, el stand de velas da realce a ese
evento. El “modelo más elaborado” (me
falta la palabra equivalente a la joya de la corona) un trabajo de filigrana,
pronto es imitado en cerámicas y lámparas. Años después desarrollará nuevas
aplicaciones con la cera. Creará lámparas que son comparadas con las de cristal
del francés Emile Gallé. Desarrollará una mezcla de ceras resistente. Investiga
en bibliotecas en Londres. Descubre que esto se llama encáustico y que los
egipcios ya lo usaban.
Su creatividad la lleva a
explorar otros campos.
Estudia diseño en el centro
C.E.A. Organiza un curso de especialización en diseño de ropa femenina, a cargo
del diseñador Marco Correa. La moda le atrae desde muy joven. Casualmente
algunos de sus diseños con detalles innovadores resultan similares a los que
presenta Ives St. Laurent en la misma temporada. Eso la anima para perseguir su
sueño, montar una empresa textil de ropa de punto. Estudia patronaje de alta
costura. El sueño se convierte en realidad: su empresa Dilatin, diseño
latinoamericano. Comienza una vorágine de colores atrevidos, clientas que
desean prendas para ocasiones especiales,
saben que destacarán
El aire se enrarece en Chile.
Tras el golpe militar la familia
emigra a Mendoza y luego a Barcelona.
Responsable de servicios en la
multinacional alemana Agfa.
Estudios de literatura y taller
de escritura con Humberto Lobosco, profesor de
Estudios de astrología con el
maestro B. Belmonte y el eminente astrólogo inglés H. Sasportas.
Estudios de psicología en el
Centro Humanista de Barcelona.
Colaboración con
Traslado a Madrid por la misma
empresa donde trabaja.
Participa en un taller de
escritura, dirigido por Laura Freixas, correctora de estilo.
Estudios de formación de
terapeutas en programación neurolingüística, dictados por el psicólogo Luis
Campos.
Traslado a Málaga.
Monta taller artesanal de velas y
encáusticos, Interkandel.
Trabaja como guía de turismo
(Consejería de Turismo y Deporte de
En Málaga se relaciona con las
poetas consagradas.
Hasta la fecha no cuenta con
obras editadas, pero con lectores pequeños que gozan con sus cuentos.
El relato Adiós Pequeña Viajera -edición reducida- ha sido usado en la universidad Nazareth College of Rochester en clases de lengua española para el enriquecimiento del lenguaje.
Sobre En brazos de la belleza de
Fátima Frutos
por Aurora Gámez Enríquez, poeta
Presidenta del Grupo ALAS
Con la única voluntad de perderme
fuera de mí como una nave errante
orientada a impedir que amaine el
goce
o que desfallezca tu mástil de oro.
Fátima Frutos del poema “Límpida luz
del alba cretense”[1]
En esta entrega poética que Fátima
Frutos nos hace encontramos su auténtico modo de ver y vivir el mundo. Ella se
posiciona una y otra vez al lado de la vida sin perder pie en lo terreno y
carnal. Con su peculiar modo de estar, sensual y telúrica nos hace partícipe de
su sabiduría a la vez que cómplices. Su verso de composición y medida libre,
consigue personalidad y estilo. No queda nada al azar, la imaginación vuela a
su mundo, el mundo de Fátima Frutos, ella quiere decir y dice, a veces cruda, y
a veces lírica. Tánatos, la muerte, está presente y deja huella, las del pasado
o quizás reciente ya que, recuperando historias, empatiza y asemeja a lo que
cada día vemos y leemos en los medios.
La
dedicatoria en agradecimiento al doctor Eduardo Uribe-Echeverría, ya nos indica
que está delicada de salud y su corazón pendiente siempre de un hilo. Vive un carpe
diem, sereno e intenso a la vez, se recrea en el arte de la contemplación
de lo bello. Ella se define a través de
Beatriz Berrocal, Rubén Darío, Gil Roëset (la mujer del ahorcado), Roque Dalson
(llegando, ella también, a la revolución a través de la poesía), Gervasio
Sánchez, Serguéi Yesenin e Isadora en ART DE CONTEMPLACIÓ: “Enséñame a adentrarme lenta de nuevo en la
Vida./ Sin tener nada más que el aliento, te contemplo / y retorno desde el
alma calcinada donde todo comienza.” De “Ante el autorretrato de Durero”.[2]
Fátima
Frutos nos adentra en la intimidad de sus personajes, quizás nuestra intimidad,
para llegar al fondo, mimetizarse, sentir lo que pudieron sentir. Ella no se
conforma con lo superficial, se duele con Serguéi Yesenin, empatiza con Isadora,
recrea paisajes agrestes, de clima continental húmedo, parajes rusos de
principios del siglo pasado: “Mi casa, en
medio de un silencio rojizo, es de madera ocre. / Tiene blancas ventanas
talladas como alabastro de arrollo / y un tejado en el que caen ramas de
abedules estremecidos.” [3]
Pensadora
y consciente recupera memoria, ser; justo lo que no se debe de olvidar, otorga
justicia, revierte el desamor, enfrenta a la desidia, atenúa el odio, denuncia la
violencia gratuita. Todo ello hace la autora de EN BRAZOS DE LA BELLEZA.
Comprometida con la sociedad, con lo humano, con la belleza, pero sobre todo
con Eros. Aleja a Tánatos, nos lo
acerca, lo relega a lo imposible, lo teme para después amarlo tal vez en un
acto de reconciliación con la naturaleza y la bondad, lo bello.
Ella sabe del peligro de repetir la
dureza del pasado pues siempre está ahí, en la memoria, ella propone redimir
recordando, haciendo visible siempre a través de lo bello.
Cada
verso, cada poema del libro, “in
crescendo” nos eleva en lirismo y compromiso, así pues, llegamos a DESCONHORT
de la mano de: Rubén Velasco, Priscilo de Pablo (el último peguero), Louis
Aragon, Marina Tsvietáieva, Natalia Goncharova (sangre sobre la nieve). En esta
segunda parte del libro, Desconhort, ahonda en la denuncia y clama de manera
elegíaca, a la manera que el maestro Ramón Llull creara en 1295, igual que él,
ella refleja la decepción ante el paso del tiempo. Así le canta a oficio
desaparecido “El último peguero”, (Alquimista y labriego a la vez / adobe,
ladrillo, resina y pez.). Se duele y clarifica: “La línea del horizonte” (“Está
aún viva mi alma -piensa- / por no haber permitido la mediocridad.”). Guerrera
ante lo imposible: “Igual que si de un
frio yelmo se tratase, / así retorna tu rostro a la fosa de mis manos. / ¡Inmóvil
como el osario que guarda la tierra! de Sangre sobre la nieve.”
Sublime
y última en el acontecer del poema nos muestra su arte magna, la herida última,
la redención de su alma, el reconocimiento de lo bello en la crudeza de la
vida. ¿Hay belleza en el dolor?, el arte
mismo de sobrevivir, la fortaleza desplegada ante la dificultad, el empeño en
salir adelante con salud y alegría, el avance mirando el horizonte con luz y
positividad. Eso es lo bello, ahí se encuentra la poesía de Fátima Frutos y su
gran valor.
Et ultima nos enamora y parte el alma con:
Marianne von Willemer, Johann Wolfgang von Goethe, Friedrich Nietzsche, Lou
Andreas-Salomé, Alda Merini, Gertrud Kolmar y personajes anónimos que están en
el imaginario colectivo (el último juglar, las supervivientes de la violencia
de género, …). Transcurre el verso y llegamos a ARS MAGNA ET ULTIMA: “Oh no …, nunca sabrán como yo te erguí / con
la solidez de un roble, arrebatado y yacente / en cada mediodía tras el paseo
por el castillo.” De “Diván de despedida” [4] . En “Sobrevivir al olvido” dedicado a las supervivientes de la
violencia de género, Fátima Frutos rinde homenaje y se posiciona al lado de las
víctimas de violencia machista. Lo hace empatizando con ellas y termina
animándolas a salir de la situación: ”Aún
es posible soñar que no he muerto /soñar que no moriremos. /Por un instante es
posible despertar / y mirar al frente. / Mirar al frente, sí. Y levantar la
cabeza.” Es en “Huyó la loba” (confesión febril a Alda Merini): “Huyó la loba de los bosques, de las trampas
/ huyó la eremita, la fogata embalsamada, la virgen umbría / huyó de la
madrugada enlutada y el sahumerio.” donde nos avoca a la desesperada en busca
de la libertad, “Huyó aterida / entre la obstinada niebla de la laguna.” [5]
Culmina
su canto con un homenaje al holocausto, ella se funde con Gertrud Kolmar en el
dolor, el testimonio de su supervivencia en Auschwitz acaba en un canto
a la posibilidad de haber sido libre, un canto a la humanidad. Importa la vida,
la de todas las almas: “Se afanan
nuestras almas en procurarnos vida / cuando todo lo que respiramos es solo
muerte.” /…/ “¿Y si la libertad de Spinoza nos salvara…? / Y si fuera esa la
única razón de existir… / Tal vez debamos dedicar cada segundo / cada minuto de
aliento al entendimiento, / a la tarea de liberarnos, como hizo el sefardí.” [6]
Agradecida
a Fátima Frutos por haberme pedido presentar su libro, yo también me acompañé y
fui de la mano de mis queridas amigas del Grupo ALAS (Autoras por la Literatura
y las Artes). Un acierto siempre contar con ellas, Inmaculada García Haro, Fuensanta
Martín Quero, Encarna López Navarro, Lola Ruiz Maurazos, Mercedes Ramos, Rosa Ruiz
Gisbert, Alice Wagner Ortuño, Larissa Sarria y Soledad Fernández Ramos. El Grupo ALAS lo conformamos autoras
libres que, desde la heterodoxia estética, asumimos el uso de la palabra, la
creación literaria y el arte, como obligación social bajo los irrenunciables
principios del compromiso y el comportamiento ético. Fátima nos conoce desde
2005, ella nos prologó el libro de Herótiko´s de ALAS[7] y desde entonces caminamos en
soridad y armonía.
Me despido con júbilo, recitando quedamente: ¡Vivo!, ¡vivo! /exclama Adela Alba vestida
de hierbabuena. / Salta sobre las ascuas de la pasión prohibida / y acaricia su
pelo azabache / tras haber probado / el mecer del junco amante. “
[1] pág. 24 “En brazos de la
belleza” de Fátima Frutos. Prólogo de Carlos Bassas del Rey. Ediciones Eunate.
Impreso en España, 2018.
[2] pág. 21 “En
brazos de la belleza” de Fátima Frutos. Prólogo de Carlos Bassas del Rey.
Ediciones Eunate. Impreso en España, 2018.
[3] pág. 26 “En
brazos de la belleza” de Fátima Frutos. Prólogo de Carlos Bassas del Rey.
Ediciones Eunate. Impreso en España, 2018.
[4] pág. 47 “En
brazos de la belleza” de Fátima Frutos. Prólogo de Carlos Bassas del Rey.
Ediciones Eunate. Impreso en España, 2018.
[5] pág.52 “En
brazos de la belleza” de Fátima Frutos. Prólogo de Carlos Bassas del Rey.
Ediciones Eunate. Impreso en España, 2018.
[6] pág. 59
“¿Y si la libertad de Spinoza nos salvara?”, “En brazos de la belleza” de
Fátima Frutos. Prólogo de Carlos Bassas del Rey. Ediciones Eunate. Impreso en
España, 2018.
[7] Prólogo
de Fátima Frutos, “Herotiko´s de ALAS” Relato corto. Autoras: Rosa Ruiz Gisbert,
Paquita Moreno, Inmaculada García Haro, Clara del Río, Aurora Gámez, Ana
Herrera, Alice Wagner, Alicia Cosme y Adelina P. Blaya. Ediciones ALAS,
Málaga-Andalucía-España, 2005.
